Opción Urbana

En el contexto urbano, el Vicariato Apostólico de Puerto Leguizamón-Solano, ha podido apreciar un sin número de realidades, que al ser particularmente diversas, exige un programa especial de evangelización.

Inicialmente, con la llegada de los primeros misioneros y misioneras a esta región, hubo una visión general del modo de vida de los pobladores en el sector urbano.

La realidad en que viven las familias en este “jardín exótico” de la Amazonía, está resumida básicamente en las pocas oportunidades laborales para la subsistencia de los pobladores; se puede observar que escasamente viven de la pesca y del trabajo en el campo en la producción de insumos como la yuca, plátano, papaya, maíz; entre otros frutos que les ofrece esta buena tierra para cosechar.

Nos encontramos también con el mundo juvenil, que se convierte en un gran desafío para llevar a cabo nuestra obra evangelizadora. Los jóvenes carecen de oportunidades para realizar su proyecto de vida, esto a causa de la realidad del contexto en materia de drogas, alcoholismo, prostitución y estos latentes estilos de vida que incluso los conducen a incursionar en las filas de los grupos ilegales que hacen parte del clima social de esta región.

Por otra parte, la población flotante acapara a todos aquellos habitantes que han llegado al territorio en busca de nuevas oportunidades, de un nuevo rumbo, y que en la mayoría de casos están huyendo de incertidumbres del pasado, y es ahí, donde en la búsqueda de una dirección inédita, con nuestra obra puedan encontrar un nuevo matiz para cristianizar sus vidas, y no, que de lo contrario, las realidades negativas de su nuevo lar, se convierta en un sobre peso para su novel destino.

En conclusión, mirar el sector urbano requiere de una visión amplia con vocación y servicio de evangelización para ir en búsqueda de un desarrollo para cada rostro que envuelve este contexto; hablamos del rostro urbano, afro, campesino e indígena que finalmente son la composición de este paraíso multicultural.